Todo empezo a las 6:00 am cuando me levante para iniciar el viaje de regreso.
Iniciaba tomando el subway para llegar a la estación de
Barcelona-Sants para tomar el
tren de Alta Velocidad que me llevaría a Madrid.
El viaje duro 2 horas y 45 minutos, bastante suave y comodo.
En la estación de nuevos ministerios me cambie al
metro de Madrid que cuesta 1 € pero por ir al aeropuerto cobran 1 € adicional. En este trayecto se pasa por la estación llamada: Colombia.


Al llegar al aeropuerto de
Barajas en Madrid y tras un fácil proceso de check-in, procedi a buscar el terminal del que saldría ya que las puertas las asignan solo al momento de embarque al avión.
La caminada hasta el terminal J esta demarcada que duraria 8 minutos. La caminada por los terminales H, J, K dura alrededor de 20 minutos.



Finalmente anunciaron el embarque por la puerta H22, donde la policía hace el control de inmigración y todos listos para subir al avión.



El avión saldría de Madrid, el tiempo de vuelo sería un poco menos de dos horas y cruzaría España . . .

Sobrevolaría Francia . . .

Cruzaria el canal de la Mancha para entrar a Inglaterra . . .


Esta vez el avión si sobrevolaría Londres para poder detallar la ciudad con un poco más de detenimiento.


En Londres en el
aeropuerto Heathrow tendría que dirigirme a la sección de conexiones, tomar un bus al terminal 5, buscar las oficinas de British Airways para imprimir el pasabordo, pasar DOS controles de seguridad entrar al terminal 5 y tomar un mini-metro que me llevaria hasta las puertas B de donde saldría mi próximo avión.






El vuelo de Londres a Newar demoraría un poco menos de 8 eternas horas. Mi asiento fue el de la salida de emergencia, así que tendría un televisor adaptado a la silla. El servicio incluiria una gran serie de peliculas y programas de TV.


A menos de una hora de vuelo pasarian ofreciendonos bebidas y alrededor de las dos horas y media de vuelo nos ofreceria una cena que consitios de Pollo Toscana, ensalada, pan, pastel de chocolate, vino, agua, chocolatina y cafe.


En pleno vuelo puse el mapa que muestra la trayectoria del vuelo y que me mostraría que sobrevolaba sobre Groenlandia . . . tuve la oportunidad de ver las tierras congeladas de la isla más grande del mundo.



Después de unas cuantas horas ya acabaría la "cruzada del charco" y se empezarian a ver las tierras canadienses. Ya en este momento la trayectoría del vuelo sería vertical y poco a poco veria como se ponia el sol en el horizonte. Al anuncio del capitan que las luces del fondo pertenecian a la ciudad de Montréal, sabía que estaba cerca a mi destino.



Un poco más de viaje y aterrizaría en las tierras estadounidenses, donde por ley no permiten tomar fotos. Cruce el proceso de migración y salí nuevamente al calor húmedo nocturno de Nueva Jersey.
Así y después de casi 24 horas de andanzas concluyó mi viaje Barcelona-Madrid-Londres-Newark.